El otro Guevarita

Luz, cámara, acción. Guido corre de la mano de su hermano. Su padrastro está enfurecido. Esta borracho y descarga su furia con esos chicos de 8 y 6 años. Guido es el mayor. Mamá se borró y los abandonó con Ramón, un albañil que sabe más de damajuanas y botellas que de cemento, cucharas y de amor.
Los años pasan. Guido no habla de su infancia. A pesar de los golpes que le dio la vida, es un buen tipo. Guido esta por cumplir 40 años. Esta es su historia, el apunte de Guido Guevara, profesión boxeador.
Guido es un pugilista de categoría welter- la del "Látigo" Juan Coggi – que es la de pesos de 67 a 70 kilos- nacido en 1958, poco antes que sea derrocado el presidente Arturo Frondizi, en un suburbio de la provincia de Corrientes. Guido Guevara, “Guevarita” para sus seguidores fue un personaje de ficción del box en Campeones, una de las primeras novelas exitosas de la empresa televisiva Polka que administrada por el actor Adrián Suar.
Si, luz, cámara… acción. Guido Guevara fue interpretado por el uruguayo Osvaldo Laport, quien compartía cartel con Soledad Silveira y Mariano Martínez, entre otros. Pero pocos conocen que Guevara existió fuera de la televisión. Su nombre es Ricardo Silva, alias “Koyak”, apodo a la sazón de su calvicie total estilo el famoso detective televisivo.
Fiel a la historia de casi todos los boxeadores, Ricardo tuvo una infancia dura. Además de los maltratos del padrastro, a los 12 años se escapó de esa casilla y emprendió un viaje que terminaría en Los Polvorines, Buenos Aires. Fue en la calle que un verdulero de toda la vida le ofreció trabajo; Ricardito era flaquito pero voluntarioso.
En ese barrio bonaerense, estaba el gimnasio de Pachuco, un galpón rancio y con olores pestilentes que era la descarga de muchos chicos. Había dos bolsas, los llamados sacos para darle unos puñetazos y un par de cuerdas que hacían de sogas. Ricardo pasaba horas en ese lugar, intercambiando golpes, aprendiendo que es un jab, un recto de derecha de izquierda. El debut llegaría a fines de los setenta.
Ese debut fue frente al Turro Turri. Madura el nocaut en el 4 round. Y fue avanzando en su carrera alentado tanto por su historia de vida y por la imagen de su ídolo: Carlos Monzón.
Gustavo Barrios y Diego Segovia (Doc9) trabajan contra reloj. Es enero de 1999 y el canal pide los guiones. Además de Laport, Silveyra, están Juan Carlos Calabró, Laura Azcurra, Julieta Diaz y Luciano Castro. Obligados a obrar de apuro, uno de los productores aficionado al boxeo recuerda la historia de Silva. Guido Guevara sería el resumen de Koyak más el recuerdo de Ubaldo Néstor "Uby" Sacco, campeón mundial en 1985 que murió en soledad a los 41 años en 1997. También pesa el corazón del olvidado Lucio “Metralleta” López (Doc9) y de José María Gatica, las promesas de Horacio Saldaño, el agrande Ringo Bonavena.
Guido es un boxeador en decadencia con una mochilla cargada de dolor. Tuvo grandes oportunidades de ser campeón del mundo, pero el juego, la bebida y las malas compañías le jugaron en contra. Guido es puro corazón, eterno enamorado de la maestra Clarita, personaje que compone Soledad Silveyra.
La historia de Koyak inspiró a los guionistas Barrios y Segovia para darle forma a Guevarita. El boxeo, deporte noble, el arte de pegar sin dejarse golpear. Que sostiene que los verdaderos campeones son aquellos que no le tienen miedo al fracaso.
Silva se retiró casi a los 45 años de edad a mitad del 2004. Campeones de la Vida duró en televisión poco más de dos años siendo la novela más premiada y vista de los últimos diez años. Silva tuvo 93 peleas profesionales (63 triunfos, 26 antes del límite, 23 traspiés, 4 empates y 3 sin decisión). Luego de Guevara, Laport no volvió a consagrarse en otro papel.
Este Apunte busca reconocer a estos boxeadores y a ese deporte tan particular como especial que es el box. Quizá fue desconocimiento pero nunca los guionistas Bario y Segovia como el mismo Adrián Suar reconocieron que el personaje Guido Guevara, fue basado en Silva. Ni quiera el ex boxeador lo reconoció o lo supo alguna vez.
Además esa novela fue la precursora de los éxitos que vinieron después. Ejemplo es la actual Valientes del 13: en su mayoría los protagonistas debutaron en Campeones 10 años antes.
El boxeo es el deporte argentino que más veces ha llegado a lo alto de un podio olímpico con el oro en las manos: Víctor Avendaño (medio pesado) y Arturo Rodríguez Jurado (pesado) en Amsterdam 1928; Carmelo Robledo (pluma) y Santiago Alberto Lovell (pesado) en Los Ángeles 1932; Oscar Casanovas (mosca) en Berlín 1936; Pascual Pérez (mosca) y Rafael Iglesias (pesado) en Londres 1948.
El Apunte en su reconocimiento a estos caballeros.

*Otros boxeadores apuntados. (en Apuntes: Box)

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